Luego de estar por espacio de tres generaciones en manos de la Familia Guarch, la residencia Streamline Moderne en el 1512 de la Calle Mirsonia, de la urbanización Terraza del Parque en Santurce, dejó de pertenecer a esta familia. La misma fue vendida el 30 de septiembre de 2021 a la razón social CONDADO LEMARE, LLC por la cantidad de Un Millón Doscientos Cincuenta Mil Dólares ($1,250,000.00).
En el Catastro Digital del Centro de Recaudación de Ingresos Municipales (CRIM), aparece como vendedora Elizabeth Robison Guarch, una nieta de don Fernando.
La razón social compradora se había inscrito en el Registro de Corporaciones del Departamento de Estado tres meses antes, el 8 de julio de 2021. Esta compañía de responsabilidad limitada está compuesta por Samuel Rodríguez Gómez (Presidente, Tesorero) y Omar Rodríguez Martínez (Agente Residente). Previo a la compra de la residencia, ya eran propietarios de un guest house en la Calle Wilson del Condado.
Los flamantes dueños de la residencia streamline de don Fernando Guarch, la han bautizado como Casa Mirsonia y la han habilitado maximizándola para un negocio de alquiler a corto plazo (airbnb). Una de las muchas cosas que más favorezco de esta administración, es la demolición del muro horroroso que cerraba completamente el bonito patio interior y lo separaba del resto de las áreas verdes de la propiedad.
Casa Mirsonia tiene sus áreas de descanso distribuidas como sigue:
En lo que respecta a la decoración de los interiores, viendo las fotos en su página de facebook y mirando el video en la plataforma de YouTube, la han puesto totalmente preciosa. Sin embargo, creo que si hubiesen incluido elementos de los años treinta y cuarenta, sin duda hubiesen maximizado la experiencia histórica de sus huéspedes.
Fuera del ocasional ruido que sale del patio interior y de la terraza del segundo piso, que a veces molesta a los titulares del vecino Condominio Gelabert Díaz, encuentro que el advenimiento del airbnb Casa Mirsonia al lado de la antigua propiedad de mis abuelos maternos y tíos abuelos, ha sido en cierto modo positivo para la comunidad.
Soy de la opinión de que los vecinos de la Terraza del Parque, tienen que sentirse afortunados, por todo lo que está sucediendo con la compra de propiedades, que inversionistas nativos hayan adquirido la antigua residencia Guarch. Por lo menos ellos han demostrado hasta ahora ser conscientes del valor histórico de la estructura de la que son propietarios, y siempre lo tienen presente en el eslogan de venta en la publicidad que hacen por internet: This recently renovated Art Deco Home...
Hay que tener en cuenta, que la extraña casa que siempre vimos pintada de verde pudo haber tenido el mismo triste final que la casa Streamline Moderne que estaba en el 57 de la Calle Frederick Krug. Allí los avariciosos propietarios la demolieron y dejaron el solar vacío con la idea de hacer un condominio. La pobre estructura fue sacrificada en vano, pues los dueños no pudieron iniciar las obras por no tener el terreno adicional necesario del Parque Ana Roqué de Duprey, ni tampoco tener el apoyo necesario de la comunidad de vecinos de el Condado y la Terraza del Parque.
Si yo fuese el propietario de la residencia de don Fernando, hubiese removido todas las alteraciones no originales que por tantos años ocultaron su verdadero rostro. Una vez arrancadas y tiradas a la basura esas caretas horribles que tanto desfiguraron sus fachadas, y restaurada al más mínimo detalle, pondría la casa a brillar como era cuando nueva, decorando sus interiores con piezas originales Art Deco / Streamline Moderne (muebles, cuadros, accesorios) todos exclusivos de esa época maravillosa.
Si sigo soñando, creo que hubiese convertido la antigua residencia Guarch en una especie de museo para nostálgicos, con oficinas de orientación y espacios apropiados para la exhibición y conservación de fotografías, planos, y documentos relacionados a construcciones realizadas en estos estilos arquitectónicos alrededor de toda la isla.
Felicito a Samuel Rodríguez Gómez y Omar Rodríguez Martínez, los principales de CONDADO LEMARE, LLC por tan acertada decisión de adquirir esta bella residencia histórica única, que para mí no tiene precio. Siendo el niño de al lado, (the kid next door) es la estructura que más he querido y admirado. Espero que los nuevos dueños sigan dándole mucho amor y la cuiden bien, con el tender loving care que tanto se merece, como lo han hecho hasta ahora. Después de todo, la antigua residencia Guarch no es cualquier casa, es la joya de la corona de la Terraza del Parque.